El abogado de Coinbase, Paul Grewal, reveló documentos que muestran que la Corporación Federal de Seguro de Depósitos (FDIC) obstaculizó a los bancos estadounidenses en la adopción de blockchains públicas. La FDIC, un regulador bancario clave, supervisa el cumplimiento de las regulaciones financieras.
Un documento describe el intento de un banco de Nueva York de lanzar un programa de “Depósito Digital Bancario” en una blockchain pública. La FDIC exigió inspecciones adicionales y criticó las redes descentralizadas, donde todas las transacciones son transparentes.
La preferencia de la FDIC por blockchains privadas, donde el acceso a los datos está restringido, plantea preguntas. Las blockchains públicas pueden desafiar el secreto bancario, pero fue el regulador - no los clientes - quien planteó objeciones, probablemente con el objetivo de preservar su control o mantener la opacidad en las operaciones.
Las blockchains públicas limitan el control de los reguladores, ya que sus registros inmutables no pueden ser alterados o eliminados. Sin embargo, esta transparencia fortalece la supervisión: los bancos no pueden negar depósitos o fabricar falsos. También responsabiliza a los reguladores, evitando la negación de compensación para depósitos verificados o pagos para aquellos inexistentes.
Esto refleja una tendencia más amplia: las monedas digitales de bancos centrales (CBDCs) operan en blockchains privadas y opacas, restringiendo el control del usuario. En contraste, las criptomonedas clásicas proporcionan independencia financiera. Y rabbit.io permite intercambios fluidos entre ellas.
La resistencia de la FDIC socava la confianza en los reguladores, ya que las blockchains públicas ofrecen a la sociedad - no a las autoridades centralizadas - un control real sobre los sistemas financieros.