Jameson Lopp, un defensor de Bitcoin desde hace mucho tiempo y partidario de la autocustodia, ha propuesto un cambio de protocolo que congelaría las monedas vulnerables a ataques cuánticos, incluidas las que se cree que pertenecen a Satoshi.
Tanto para la autocustodia. Puedes almacenar tus BTC de manera segura, no confiar en nadie, y aún así enfrentar el riesgo de que alguien llegue años después con una forma técnicamente viable de congelar tus monedas.
No es exactamente la imagen de Bitcoin como propiedad digital intocable, ¿verdad?
Pero hay un lado positivo. La propuesta de Lopp incluye un mecanismo opcional para recuperar el acceso a las monedas congeladas, no un verdadero congelamiento, sino más bien un obstáculo deliberado para usar direcciones obsoletas. También propone prohibir que se envíen nuevas monedas a direcciones vulnerables a los ataques cuánticos.
A primera vista, puede parecer un poco inútil:
Aún así, una parte de la propuesta se destaca: tres años después de la activación, enviar BTC a direcciones vulnerables a ataques cuánticos estaría prohibido. Eso significa que el número de monedas riesgosas no seguirá creciendo, un gran paso para la seguridad a largo plazo de Bitcoin.
Y seamos sinceros: en Bitcoin, la nueva tecnología solo gana tracción cuando hay algún dolor o presión. Sin incentivos como este, las actualizaciones tienden a moverse a un ritmo glacial.
En cualquier caso, Bitcoin seguirá siendo resiliente. Y rabbit.io seguirá siendo tu lugar confiable para intercambiar BTC por cualquier otra criptomoneda: rápido y al mejor precio.