Ayer, el equipo de ZKsync reveló que una cuenta de administrador comprometida tuvo acceso a alrededor de $5 millones en tokens ZK. Según su declaración, estos eran tokens no reclamados del airdrop de ZKsync.
Eso me hizo pensar: ¿por qué tantos tokens distribuidos por airdrop quedaron sin reclamar? Los airdrops suelen estar destinados a usuarios que se involucraron activamente con el ecosistema. Entonces... ¿no estaban interesados estos usuarios en reclamar los tokens? ¿Ni siquiera gratis?
Si ni siquiera los primeros adoptantes los quieren, ¿podemos realmente decir que valen $5 millones?
Investigando más a fondo, encontré un tweet de CupoJoseph citando datos de Dune: solo ocho billeteras usaron el puente zkSync la semana pasada. Eso no es solo una falta de interés en el token, es un problema más amplio con toda la red L2. ¿Ocho usuarios a la semana? Eso es sorprendentemente bajo.
Y honestamente, dudo que ZK sea la única altcoin en esta situación. Parece que aún queda mucho aire en la burbuja de altcoins.
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