El miedo ante la caída del precio de bitcoin sigue propagándose por las noticias y las redes sociales. Pero aquí está la verdadera pregunta que quiero plantear:
¿Alguno de los conocidos motores de crecimiento de bitcoin ha dejado de funcionar realmente?
- Efecto de red. Cuantas más personas usan y mantienen bitcoin, más fuerte y valiosa se vuelve la red. Su atractivo para empresas y nuevos participantes es innegable.
- Adopción global. Bitcoin es reconocido no solo por tenedores minoristas, sino también por fondos de inversión, instituciones financieras e incluso gobiernos. Su valor es reconocido a nivel mundial.
- Demanda institucional. Grandes actores como Strategy compran bitcoin en cantidades masivas y a menudo lo mantienen durante años, eliminando efectivamente liquidez del mercado.
- Estatus de oro digital. Cada vez más inversores ven a bitcoin como una cobertura contra la inflación, la devaluación de la moneda, la incertidumbre política y las restricciones de capital.
- Independencia frente a los gobiernos. Bitcoin no puede ser confiscado, congelado ni bloqueado de forma centralizada. Este nivel de soberanía respalda de forma constante la demanda a largo plazo.
- Aumento de la confianza después de cada ciclo. Tras cada invierno llega la primavera. La red ha estado funcionando durante 16 años sin fallos centralizados. Esa resiliencia genera confianza en los inversores.
- Depuración de manos débiles. Los traders minoristas venden por pánico en las caídas, mientras que los holders a largo plazo acumulan más.
Entonces... ¿alguna de estas cosas ha dejado de ser cierta?
No lo creo. Lo que significa que realmente no hay nada de qué preocuparse.